En La Matanza la izquierda al Concejo Deliberante
La impresionante caída de votos del FDT a nivel local en las PASO respecto a la elección del 2019 se explica por el enorme retroceso social que vive el distrito y en particular por el ajuste que desarrollo el gobierno desde que asumió en 2019.
Luego de 38 años de gobierno del PJ en La Matanza -y de la alternancia en la presidencia del país de peronistas, radicales y macristas- nuestro distrito sigue siendo el emblema de la pobreza en la provincia.
En La Matanza 7 de cada 10 niñes son pobres y centenares de miles de familias viven en los 122 asentamientos precarios del distrito. La mitad de las calles se encuentran sin asfaltar, el 40% de la población no tiene acceso al suministro de gas natural y a red cloacal. Y en el tercer cordón, este índice asciende al 97%.
Espinoza dice que La Matanza es la “capital nacional de la industria”, pero la desindustrialización avanza de la mano de los cierres de los talleres metalúrgicos y gráficos. En realidad, La Matanza es “la capital” de los talleres clandestinos, lo que ha llevado a que el 70% de la mano de obra sea precaria. También se extienden los despidos arbitrarios, como sucede con la multinacional Swiss Just.
Proliferan las industrias contaminantes como Parex Klaukol o SAF en Virrey del Pino. Se mantiene firme el CEAMSE en González Catán y el intento de eliminar los pocos espacios verdes aún existentes, como la reserva natural de G. de Laferrere.
Es claro que en La Matanza las patronales gozan de la impunidad que le garantiza el gobierno para despedir, flexibilizar las condiciones de trabajo, reducir los salarios y depredar el medio ambiente.
En contraste con eso, Espinoza mantiene los números del municipio bajo secreto y, junto al gobierno provincial y nacional, descargan un ajuste brutal sobre la salud, la educación y las familias trabajadoras.
Los hospitales se encuentran sin insumos y los sueldos de sus trabajadores se encuentran debajo de la línea de pobreza. A las escuelas no llegan los mil millones de pesos del fondo educativo. Por eso el sistema se encuentra en emergencia edilicia y no hay un plan de construcción de escuelas nuevas.
Tampoco hay un verdadero plan de obras públicas ni de construcción de viviendas populares. Y la secretaría de la mujer del municipio es una cascara vacía sin presupuesto, revelando que el municipio no tiene ningún interés en la protección de las mujeres en situación de violencia.
La histórica elección del FIT-U en el muncipio, alcanzando un 7,50% en la categoría a Concejal, plantea la posibilidad concreta del ingreso de la izquierda, por primera vez en la historia, al Concejo Deliberante de La Matanza.
Un Concejal del FIT-U sería un vocero de todas las luchas que recorren el distrito contra el ajuste de Espinoza y un vocero contra la agenda antiobrera de la oposición de derecha. Reforzará la lucha en defensa del salario, el trabajo, las jubilaciones, el derecho a la vivienda, a la salud y a la educación.
El 14 de noviembre votemos al FIT-U.