El próximo 16 de abril, las y los trabajadores tenemos una gran oportunidad: pronunciarnos contra todos los políticos capitalistas responsables del saqueo, la entrega, pobreza y darle curso a una salida de fondo con la izquierda y las/os trabajadoras/es.
Desde Gutiérrez hasta su correligionario “Rolo” Figueroa, desde Rioseco hasta Cervi o Eguía, pretenden imponer la idea que si les va bien a las petroleras que saquean Vaca Muerta nos irá bien a las y los trabajadores y los sectores populares. Hablan hasta por los codos del “efecto derrame”. Esto es falso. Llevamos décadas en que las empresas “la juntan con pala”, mientras que el pueblo somos cada vez más pobres.
No se puede ocultar que quienes trabajamos y estudiamos asistimos al ataque de todas nuestras condiciones de vida. El salario y las jubilaciones son ajustados por los gobiernos y las patronales. Los trabajos que se consiguen son precarios, en negro y con largas jornadas de trabajo. Nuestro sistema de salud y educación están desmantelados y desfinanciados para convertirlos en negocios capitalistas. El acceso a la vivienda es nulo, y las pocas que se construyen, son entregadas a las cooperativas amigas del poder.
Esta realidad es responsabilidad de todos los que nos gobernaron. Desde los 60 años de MPN como de los gobiernos nacionales de turno, todos nos dejan una provincia con mayor pobreza, sin industria y sometida a un saqueo histórico. Vaca Muerta es un botín de las petroleras con record de producción para ellos y pobreza, indigencia y contaminación para la población.