Modificación de la Ley 1688 – Centros Integrales de Mujeres (CIM)

  • Mujer y diversidades
Presentado por:   

Expediente 1985-D-2021

Proyecto de Ley

Artículo 1°.- Modificase el Artículo 15° de la Ley 1688, que quedará redactado de la siguiente manera:

“Artículo 15º.- Centros Integrales de Atención:
a. Denomínase Centros Integrales de la Mujer y Diversidades (CIMyD) a los centros integrales de atención que funcionan bajo la órbita de los Centros Integrales de la Mujer (CIM),

  1. Créanse nuevos CIMyD para cada comuna a los fines de contar con un CIMyD cada 50.000 habitantes. La instalación de los mismos comenzará por los siguientes barrios hasta completar el objetivo de la presente ley:
  • Ciudad Oculta
  • Soldati
  • Cildañez
  • Villa 1-11-14
  • Villa 21-24
  • Barracas
  • La Boca
  • Villa 31
  • Rodrigo Bueno
  • Constitución
  • Mataderos
  • Liniers
  • Pompeya
  1. Los CIMyD brindarán atención y realizarán el seguimiento, y la recuperación de la víctima, ofreciendo un espacio de seguridad y un tratamiento integral sobre los orígenes de la violencia sufrida y dispondrán de herramientas sociales y económicas que apunten a la reparación de los daños que la violencia les hubiere generado.
  2. Los CIMyD brindarán atención íntegramente gratuita. Las líneas telefónicas y la atención de manera presencial deberán funcionar las 24 horas los 365 días del año.
  3. Crease para cada CIMyD equipos interdisciplinarios integrados por abogadxs, trabajadorxs sociales, psicólogxs y todo el personal y profesional de cualquier disciplina que se requiera para una correcta atención.
  4. Incorpórase a la planta permanente de GCBA a todo el personal profesional y administrativo quienes cumplan funciones en lo CIMyD existentes hasta la fecha de sanción de la presente ley, y al nuevo personal de los cargos creados a fin de cumplir con la aplicación de la presente ley
  5. Incorpórese a la órbita de la Dirección General de la Mujer las ONG que actualmente gestionan CIM a los fines de garantizar que el conjunto de CIMyD sean de gestión pública.
  6. Se creará una Comisión de control y seguimiento compuesta por quien dirija la gestión de cada CIMyD, unx representante electx de lxs trabajadorxs de cada Centro y representantes de organizaciones de mujeres y diversidades, de la comunidad de derechos humanos, barriales y sindicales del territorio correspondiente. La misma funcionará con una regularidad de dos veces por mes.”

Artículo 2°- Se destina una partida presupuestaria extraordinaria.

Artículo 3°- Comuníquese

FUNDAMENTOS

Los Centros Integrales de Mujeres (CIM) son dispositivos dependientes de la Dirección General de la Mujer (DGMuj) que fueron creados para abordar casos de violencia de género por equipos interdisciplinarios especializados que acompañen y asistan a las víctimas de manera integral. Los mismos fueron conquistados a través de la intensa lucha por Ni Una Menos en 2015, pero según las denuncias de vecinas de la ciudad y organizaciones de mujeres están lejos de garantizar una verdadera asistencia integral. Se cuestiona la falta de accesibilidad a los mismos. Al existir actualmente solamente uno por comuna, muchos barrios terminan alejados espacialmente de los centros y a su vez no se brinda atención las 24hs. Con la pandemia esta situación se agravó al punto de que no todos los centros funcionan presencialmente.

Las estadísticas brindadas por la Oficina de Violencia Doméstica (OVD)  -dependiente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación- en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires para el primer trimestre del corriente expresa que 2297 personas acudieron por asistencia, siendo un 78% de esas personas mujeres y un 22% varones menores de edad. En la mayoría de los casos registrados la violencia ocurre por parte de parejas (49%) o familiares (34%). A su vez se clasifica en Niveles de Riesgo: los casos atendidos siendo un 39% de los casos clasificados como “alto riesgo” y un 53% como “moderado riesgo”. Estas cifras se traducen en ejemplos concretos como el de Esther Mamani asesinada en febrero del corriente año, quien había denunciado reiteradas veces a su ex pareja antes de ser víctima de femicidio. Luego de 6 meses de su asesinato, Mayra una vecina del mismo barrio que Esther (1-11-14) fue golpeada brutalmente por su ex pareja, nuevamente luego de denuncias y hoy se encuentra peleando por su vida. La mayoría de los casos registrados por la OVD provienen de la comuna 8 (12%), comuna 4 (11%), comuna 1 (9%) y comuna 7 (8%). Que se trate de las comunas donde se encuentran las villas más populosas de la ciudad no es casualidad, pone de relieve la correlación entre la pobreza y la violencia de género. Vecinas de barrios importantes de estas comunas como Soldati, Bajo Flores, Lugano y la villa 31 son justamente las que se encuentran desde hace años demandando que se abran nuevos Centros Integrales dentro de los barrios y se garantice que la atención sea las 24hs. Al mismo tiempo, el informe de la OVD arroja que entre los tipos de violencia más identificados por las denunciantes se encuentran la violencia psicológica (97%) y física (53%), lo que demuestra la importancia instrumental de estos centros para asistir con los equipos interdisciplinarios de profesionales que trabajan en ellos éstos casos.

Además se plantea la necesidad de incluir en su denominación,  atención y seguimiento a la población LGBTI+ de la ciudad. Según un informe realizado por el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio en el 2020 ocurrieron 152 ataques contra las diversidades sexuales, que se distinguen en ataques al derecho a la vida (57%) y ataques a la integridad física (43%). Desgranando las identidades que particularmente sufren la violencia observamos que encabezan la lista las mujeres trans (84%), seguidas por las identidades gay (12%), lesbianas (3%), y varones trans (1%). Respecto a la autoría de los crímenes registrados se distingue entre los perpetrados por particulares (45%) donde la cifra entre agresores conocidos y desconocidos para las víctimas es similar (ambas rondan el 22%) y los ataques perpetrados por acción de funcionarios y organismos del estado (44%) y por las fuerzas de seguridad (11%) que responden al Estado. Para la población trans la expectativa de vida es de 35 años. Además existen las omisiones del estado a los derechos que debe garantizar. Recientemente se aprobó la Ley Nacional de Cupo Laboral Travesti Trans, arrancada por el movimiento LGBTI que históricamente denuncia la exclusión laboral (1 de cada 10 personas TTNB tiene empleo en relación de dependencia y el 70% se dedica a la prostitucion como única posibilidad de ingreso). La creación de Centros Integrales con capacidad para atender las problemáticas particulares de este colectivo tan golpeado por la violencia de género y sexual representa no solo un reconocimiento de su situación, sino también una política concreta para paliar y registrar estas cifras escalofriantes. Por el rol que el estado que aquí se describe, la gestión de los centros debe contar con un seguimiento y control de las agrupaciones de mujeres y diversidades comprometidas con la lucha para poner fin a la discriminacion y crímenes que se perpetran contra estas identidades.

A estos datos debemos sumar los presentados por el observatorio Lucia Perez que informa 174 femicidios y transfemicidios en el país, es decir 1 cada 29hs.

El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires desde el 2015 a esta parte se ha limitado a poner en funcionamiento 16 CIM, esto implica 1 por Comuna y 2 en el caso de la comuna 3.  No se basó en la construcción de nuevos centros, sino en la formulación de convenios con ONGs dedicadas a esta problemática hasta el 2015, lo que derivó en una tercerización de la asistencia y según informes respectivos presentados por la DGMUJ a la legislatura en el 2020, 9 de los 16 CIM existentes funcionan bajo esta modalidad. Las limitaciones en el funcionamiento de los centros que vecinxs y organizaciones señalan actualmente responden a esta política de vaciamiento. Refrendando la necesidad de construir nuevos centros es que se plantea la creacion de 1 CIMyD cada 50.000 habitantes de la comuna, independientemente del sexo y género.

Esta cifra redunda en el piso mínimo de 4 CIMyD en comunas que superan los 220.000 habitantes y 3 centros en las comunas con menos habitantes. La propuesta es que la atención de cada Centro se vuelque a la particularidad de los barrios y atendiendo a la urgencia en la demanda de algunos barrios de la capital. Se propone prioridad en las creación de los centros correspondientes a Ciudad Oculta, Soldati, Cildañez, Villa 1-11-14, Villa 21-24, Barracas, La Boca, Pompeya, Villa 31, Rodrigo Bueno, Constitución, Mataderos y  Liniers.

Otro punto fundamental para revertir las deficiencias en el funcionamiento actual tiene que ver con la planta total, condiciones de trabajo y contratación de lxs trabajadorxs de los centros. Para garantizar atención las 24hs los 7 días de la semana se necesita ampliar la planta de profesionales actual, al mismo tiempo el conjunto de lxs trabajadorxs necesitan un salario y convenio laboral acorde a las tareas prestadas para brindar una atención de calidad, por eso se plantea incorporar a la planta permanente del GCBA al conjunto de dichxs trabajadores profesionales y administrativos. A su vez, se plantea que la gestión de los Centros que existen y los que se construyan sean de gestión estatal, dependiendo de la DGMuj y con presupuesto del Gobierno de la Ciudad.

Para involucrar a los sectores que se preocupan y organizan para terminar con las problemáticas de violencia de género se propone la conformación de una comisión de control, con participación organizaciones de mujeres y diversidades de los barrios en cuestión junto a las autoridades del centro y representantes de lxs trabajadorxs del Centro.

Por los argumentos planteados es que llamamos a las distintas agrupaciones y sectores en lucha a apoyar el presente proyecto en las calles, y a lxs legisladorxs integrantes del parlamento porteño a acompañarlo.