A 19 años, la impunidad sobre este crimen de Estado muestra la continuidad de un aparato represivo que mantiene intacta su política represiva a las luchas y al movimiento popular. El gobierno de Alberto Fernández no solo expresa la continuidad de aquel régimen ajustador que llevó a la Masacre de Avellaneda, sino que integra directamente a parte de los responsables políticos e intelectuales de aquel crimen contra la clase obrera. Felipe Solá, actual ministro de Relaciones Exteriores, quien en 2002 fue Gobernador de la Provincia y dio la orden de reprimir. Duhalde y Aníbal Fernández quienes operan desde las sombras con total impunidad. Por otro lado, el empoderamiento de la policía bonaerense que tiene a Sergio Berni a la cabeza es otra demostración del fracaso de este gobierno que solo se puede valer de represión para hacer pasar el hambre, la pobreza y la desocupación siguiendo el plan del FMI.
Al igual que el año pasado, este acto esta atravesado por una enorme crisis sanitaria, económica y social. Se tomarán los recaudos sanitarios necesarios para poder llevarlo adelante y continuar denunciando la represión e impunidad de ayer y de hoy. Reclamamos juicio y castigo para todos los responsables. Como también denunciaremos la complicidad y el mantenimiento del aparato represivo que sigue atacando a los luchadores populares y persiguiendo a la juventud. Las causas por las que lucharon Maxi y Darío están más vigentes que nunca.
¡Duhalde, Solá y Fernández tienen que pagar!
¡Juicio y Castigo a los responsables políticos y materiales!
¡Abajo la impunidad de ayer y de hoy fuera Berni!
Eduardo Belliboni dirigente nacional del Polo Obrero 11 5690-1599