Pitrola señaló que: “En la reglamentación de la reforma laboral se excluyen los contratos de obra y servicios de agencia de la ley de contrato de trabajo (LCC), lo mismo que los «colaboradores independientes» legalizando el fraude laboral; se premia el trabajo informal al eliminar las multas y deudas, se quebranta al Anses al enchufarle cinco años sin aportes de quienes estuvieron en negro y al trabajador el resto de años que no se les reconocen; quedó firme la anulación de las reinstalaciones en caso de despido arbitrario o de persecución antisindical; se habilita el «fondo de cese» en lugar de la indemnización a nivel convenio de empresa y aún de manera individual para los nuevos empleados; y, como frutilla al postre, no se reglamentó el despido causado por «bloqueo» en huelga lo que dará lugar a la interpretación patronal libre que después habrá que ir a litigar a la Justicia durante años. Brutal. De la reforma laboral “light” que prometió la burocracia sindical a una reforma laboral agravada.”
“Los tres meses de negociaciones entre el gobierno de Milei y la CGT han terminado en una humillación a la central obrera por parte de Sturzenegger y el CEO de Techint que ocupa la Secretaría de Trabajo, o, dicho de otra manera, en el previsible resultado de la orientación colaboracionista de Gerardo Martínez, Andrés Rodríguez, Daer y con ellos de los presuntos «críticos» como Pablo Moyano, pero que no sacan los pies del plato. Se impusieron «el coloso» y la UIA. Indudablemente para derrotar a Milei y su ofensiva contra los trabajadores tenemos que pasar por encima de la burocracia sindical”, concluyó Pitrola.
Néstor Pitrola 11 5324-2356
