El movimiento de mujeres a partir de #NiUnaMenos, luego potenciado por la lucha por el derecho al aborto legal seguro y gratuito, nos ha permitido poder tomar conciencia a muchísimas compañeras respecto al sometimiento y violencia en relaciones personales mantenidas en el marco de esta sociedad capitalista que promueve relaciones basadas en la desigualdad, en la opresión y la explotación. Estimula y utiliza la opresión hacia las mujeres como una parte fundamental de la dominación de la burguesía hacia la clase obrera. Esta situación se expresa de muy distintas formas, visibles algunas, invisibles otras, donde intervienen las iglesias y las distintas instituciones del Estado, formas de dominación que se expresan en la cultura, en la educación, en la atención en la salud, en los regímenes laborales y en las relaciones interpersonales que por supuesto no pueden estar al margen de esto.
Por eso, más allá de distintas conquistas que podamos ir logrando en esta lucha contra la opresión en todas sus facetas, dentro de esta sociedad capitalista tendremos que lidiar para intervenir puntualmente en cada una de las situaciones que vayan apareciendo.
Con esta comprensión desde el PO hemos atendido a todas las situaciones de violencia/abuso que pudieran estar atravesando nuestras compañeras o que fueran denunciadas a nuestro partido por haber sido protagonizadas por miembros de nuestras filas. Militamos para la transformación social, para terminar con toda forma de opresión, pero esto no nos exime de estar nosotros mismos atravesados por patrones imperantes en la misma sociedad a la que combatimos. A la vez apostamos a la reversión de comportamientos opuestos a la moral socialista en base a la comprensión y el trabajo consciente y al trabajo individual que corresponda en los casos que sea posible.
En nuestro partido, todas las denuncias recibidas tuvieron un tratamiento por parte de comisiones integradas por distintos y distintas compañeros y compañeras que se dedicaron a cada caso en particular, teniendo las distintas situaciones diferentes resoluciones y separando en algunos casos preventivamente al denunciado mientras se desarrolla la investigación y después de ellas cuando así lo aconsejó la evaluación realizada.
A fines del año pasado recibimos una denuncia de SM, que ahora hace pública desde las redes, y en base a la situación que nos expuso solicitó la separación de DD de las filas partidarias dado que lo denunciaba como manipulador y psicópata. En ningún momento cuestionó su continuidad como docente, ni su cargo sindical. Se trata de una relación de pareja terminada hace 8 años y donde ella denuncia un conjunto de situaciones de violencia y abuso. Su tratamiento, de acuerdo al propio carácter que tenía la misma fue completamente confidencial y riguroso, y donde se priorizó el cuidado y respeto a las personas que involucraba. A SM le presentamos una propuesta de entrevistas que haríamos, que no fue rechazada, y le propusimos sumar a quien ella nos presentara, cuestión que no hizo.
En el momento de la reunión con SM ella ya no militaba ni en el PDT ni en el PO, puesto que estaba con una licencia discutida y acordada en el frente donde participaba, lo que por supuesto no impidió que sea escuchada y tuviera reuniones e intercambios con compañeras del partido al efecto de recibir su denuncia. Su condición militante y su situación en el partido nada tuvieron que ver con esta denuncia. Se realizaron varias entrevistas con la denunciante y dos con el denunciado. A la vez a ambos se les solicitó que expusieran la situación por escrito. En el caso de DD nunca conoció el texto ni detalle de lo planteado por SM hasta que ella lo publicara en redes.
También se realizaron entrevistas sobre el entorno de DD para evaluar si en las relaciones en su entorno social había elementos de comportamiento violento, sistemático o psicopático. También con un ex terapeuta, que lo trató luego de la relación con SM. A quien respetando el secreto profesional que corresponde se le consultó como profesional si podía considerar que DD fuera un manipulador y/o psicópata y/o violento y/o perverso. En todos los aspectos respondió negativamente.
Consideramos que la devolución de nuestra investigación y conclusión no correspondía hacerla por mail, motivo por el cual esperamos el regreso de SM del extranjero. Entendemos que no se trata de resoluciones de tipo administrativas sino que deben contemplar procesos de intercambio en función de procesar de conjunto la situación y la resolución. A su regreso sólo nos fue comunicado su rechazo a reunirse.
Resolver sobre estas situaciones, las contradicciones que van surgiendo sobre los propios hechos relatados es extremadamente complejo y prácticamente imposible, considerando también los límites de los elementos que puede recabar una organización. Con los elementos disponibles a ese momento, en este caso en particular, considerando la devolución por parte del profesional que lo atendió durante casi tres años en un tratamiento comenzado luego de esa relación y las evaluaciones del entorno familiar y social actual de DD (y por lo tanto posterior a ese tratamiento), se evaluó que no correspondía separarlo ni expulsarlo de las filas partidarias.