El despliegue de la flota norteamericana frente a las costas de Venezuela plantea la amenaza directa de una intervención militar en esa nación hermana. El propósito es ultimar un golpe de Estado dirigido a voltear al gobierno de Nicolás Maduro y colocar un gobierno títere. Denunciamos esta escalada y exigimos el retiro de la flota yanqui y el cese del bloqueo económico contra Venezuela (y contra Cuba) que impide el ingreso de alimentos y medicinas para encarar la pandemia del coronavirus.
La recompensa de 15 millones de dólares anunciada por el belicista Donald Trump, contra Maduro, es un llamado a un magnicidio, como se evidenció con el asesinato del general iraní Soleimani en Irak, por comandos norteamericanos bajo órdenes directas del presidente yanqui. Trump es el principal ejecutor del terrorismo internacional que está dirigido contra los pueblos que osan contrariar al imperialismo.
Denunciamos la actitud cipaya de los presidentes latinoamericanos del Grupo de Lima que acompañan y hasta se aprestan a participar de una invasión.
Las declaraciones del presidente Alberto Fernández –que mantiene a la Argentina en el Grupo Lima- si bien no acompaña el despliegue de la flota imperialista, apoyan las presiones para “la búsqueda de una salida política que lleve la necesaria renovación institucional en el más breve plazo”. Esto habilita las maniobras golpistas que, como ocurrió con Evo Morales en Bolivia, obligue a la renuncia de Maduro.
Llamamos a todas las organizaciones obreras, estudiantiles, populares a pronunciarse por el retiro de la flota yanqui y el levantamiento de las sanciones contra Venezuela y a organizar la movilización política continental para detener la agresión imperialista en marcha.
PARTIDO OBRERO