Romina Del Plá, diputada del Frente de Izquierda, dijo: “El apuro del gobierno por aprobar este Presupuesto responde a un requisito del FMI para continuar con la renegociación de la deuda externa. Este presupuesto proyecta un ajuste en educación, salud, en las jubilaciones y los salarios y mayores impuestos a los trabajadores para la enarbolada reducción del déficit fiscal y mayor endeudamiento para financiarlo, ya que la emisión monetaria nos ha lleva al borde de la hiperinflación.”
“Otra hipocresía de este presupuesto es que es un presupuesto con Perspectiva de Género: no se dispone una sola medida tendiente a aumentar específicamente los ingresos de la mujer trabajadora. Es una operación estadística y no un real gasto destinado a las necesidades urgentes de las mujeres.”
“El ajuste contra el pueblo está en marcha y se va a profundizar. Los jubilados perdieron entre el 6 y el 15% de sus ingresos reales. Se elimina desde fin de año el IFE. Pero los subsidios a las petroleras, eléctricas y transportistas se multiplican. A la promoción del biocombustible se destinan 16.904 millones, que después tendrán que pagar los trabajadores en los aumentos del combustible.”
“No es un Presupuesto para que Argentina crezca, ni terminar con los problemas sociales sino un presupuesto de ajuste contra el pueblo trabajador que el Frente de Izquierda rechaza de plano sobre la base de defender un plan económico y social antagónico: no pagar la deuda externa, restituir los aportes patronales a las cajas de previsión social, terminar con los subsidios a las gasíferas. Aumentar los salarios, jubilaciones y subsidios a la desocupación, al nivel de la canasta familiar. Aumentar el presupuesto de educación y salud. Impuestos progresivos a las grandes fortunas. Nacionalizar las empresas de servicios públicos que esquilman al país, el comercio exterior y el sistema bancario.”