La audiencia realizada en el Tribunal Superior de Justicia ha reflejado la disgregación de los partidos que se disputan la sucesión del país y de la Ciudad.
Por un lado, el macrismo ha promovido una "reglamentación" del voto en pantalla electrónica que visualiza en primer lugar a los partidos y agrupaciones, y sólo en segunda instancia a los candidatos. El objeto de esta presentación es ocultar detrás de la sigla PRO al candidato Rodríguez Larreta, protegido de Macri y de la camarilla de funcionarios que le ha entregado el presupuesto porteño a la "patria contratista". El kirchnerismo, que enfrenta la elección con candidatos desprestigiados y sin chances, se sumó a esa posición.
Del otro lado, el radicalismo, Ocaña y algunos otros han impugnado este criterio en nombre de que "oculta a los candidatos". Este bloque busca disimular, detrás de ciertas `figuras`, a la declinación -o inexistencia- de los partidos o siglas electorales que los impulsan. Entre ellos, la misma UCR. La boleta única, en ese caso, sería el pretexto para reemplazar una delimitación de bloques y planteamientos políticos por una selección entre fotos y personas. A este planteo se ha sumado el partido de Bodart, en sintonía con su larga descomposición política.
La despolitización de la elección apunta a reforzar la manipulación del electorado, e incluso los pactos en ciernes entre quienes se "enfrentaron" en la audiencia de hoy. Por caso, el mismo radicalismo que impulsa a Lousteau -y que impugna el sistema electoral que reglamentó el gobierno de Macri- prepara un pacto con Macri para la elección presidencial.
En la audiencia de hoy, los apoderados del Partido Obrero y del Frente de Izquierda denunciaron las manipulaciones políticas de ambos bloques y defendieron el siguiente planteo: la boleta única "electrónica" debe identificar clara y nítidamente a cada agrupación política. La foto del candidato, cuya inclusión defendimos -a diferencia del PRO y del kirchnerismo-, no puede superar a la del partido, en visualización y tamaño.
Nuestros candidatos no se postulan como carreristas personales. Expresan un programa y una perspectiva política, en oposición al transfugismo y a la disgregación política de quienes gobiernan y han gobernado la Ciudad.
Partido Obrero de la Ciudad