Gabriel Solano expresó: “El presidente junto con su hermana y otros funcionarios de su gobierno incurrieron en los delitos previstos en el art. 173 (defraudación), art. 174 (fraude contra administración pública), art. 248 (abuso de autoridad), art. 260 (malversación de caudales públicos), y concordantes del Código Penal. El avión presidencial debería ser utilizado exclusivamente para cuestiones de interés nacional y no para que el presidente y su equipo viajen cómodamente a actos de partidos amigos suyos. El mismísimo Javier Milei ha reconocido que se trata de un viaje privado para impulsar la campaña proselitista del partido “Vox” por sus redes sociales. Los bienes y fondos públicos no son para beneficio del presidente.”
“El presidente y el conjunto de su gobierno se encargan de perseguir y denunciar de robo y malversación de fondos a quienes se organizan contra el hambre mientras que él hace uso a su antojo y para necesidades de exclusivo interés propio y de sus aliados ultraderechistas. Exigimos que sea investigado y aplicado un justo castigo por los delitos que lleva adelante.”